OTOÑO CULTURAL
Este sábado, 14 de octubre, da comienzo la temporada de otoño del Teatro Municipal Las Cigüeñas con Quintet Edition, un nuevo concierto del ciclo Clásicos en Hoyo. El Quartetto Da Vinci, acompañado en esta ocasión por el pianista Pierre Laurent Bourchalat, nos ofrecerá un programa de música de cámara: el Cuarteto para cuerdas n.1, Op.2, de Edvard Grieg (1843-1907), y el Quinteto n.2, Op.81 para piano y cuerdas, de Antonin Dvořák (1841-1904).
Grieg fue un compositor y pianista noruego, considerado uno de los principales representantes del Romanticismo tardío. La música de Grieg tiene aires de vida campestre y de contacto con la naturaleza, aspectos que tuvieron gran peso en la vida del músico. De hecho, Grieg comenzó a escribir el Cuarteto en sol menor en el verano de 1877 en Lofthus, una pequeña localidad rural al pie de los fiordos de su Noruega natal. El tema principal de la obra proviene de una canción escrita por el propio Grieg titulada Spillemaend (que puede traducirse como “Juglares” o “Violinistas”). Trata sobre el Hulder, un espíritu del agua que ofrece a los juglares grandes regalos musicales a cambio de su felicidad. Grieg enuncia ya al principio de la obra el tema de esta canción, el cual se mantiene presente, reapareciendo durante toda la pieza.
Dvořák fue un compositor posromántico natural de Bohemia — territorio entonces perteneciente al Imperio austro-húngaro —, uno de los primeros compositores checos en lograr el reconocimiento mundial. Le debemos, después de Brahms, la mayor contribución a la música de cámara de la segunda mitad del siglo XIX. El Quinteto para piano n.° 2 en la mayor, Op. 81, compuesto en 1887, figura entre sus mejores obras para cámara. Es uno de los ejemplos más admirables de la habilidad de Dvořák para crear obras que, conservando los típicos giros y ritmos de la música folklórica, exhiben una exaltada belleza y logran combinar el refinamiento estructural, la amplitud emocional y la profundidad que caracterizan a una obra maestra.
